La caza con arco en la Val d’Aran

La caza con arco y flechas requiere, tal vez, un proceso más laborioso de aproximación a la pieza. Esta capacidad de colocarse tan cerca ó de conseguir que la pieza se nos arrime hasta escuchar su respiración, es lo que verdaderamente satisface al cazador arquero.

La muerte siempre es el final perseguido.

Sin embargo un buen día de caza con arco, las más de las veces a nuestro pesar, no cumple con una pieza abatida, aunque el morral retorne lleno de sensaciones nuevas, viejas, atávicas, duras y siempre motivadoras.

Todas las ventajas son de la pieza ………..y así debe de ser.

Pocos segundos antes de que un arquero tenga su pieza delante de su arco, parecen retornar aquellos dones escondidos, perdidos en nuestra memoria ancestral y que, por un instante, sin haberlos estudiado afloran como aprehendidos. Es la magia del arco.

Acostumbrados a los utensilios de caza modernos, precisos, altamente eficaces y que nos facilitan la tarea, el arco es una forma nueva de cazar donde todo ó, al menos mucho esta por aprender, hay que sacarlo de nuestra memoria ancestral…..Buscarlo ya es, en sí, un placer.

Invitamos a conocer y a disfrutar de esta forma antigua de cazar, tan moderna como ninguna pues requiere de una herramienta altamente poderosa: nuestro cerebro.

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